Contexto histórico, social y cultural del siglo XV
Vamos a hablar de la sociedad, la crisis política, la cultura, la mentalidad y los géneros literarios del siglo XV.
El siglo XV, cronológicamente, empezó en enero del 1401 y terminó en diciembre en 1500.
Es llamado el siglo de las innovaciones, ya que en este periodo hubo grande cambios impulsados por la situación tanto política como social. Se produjeron además los nuevos descubrimientos geográficos y hubo acontecimientos como la invención de la imprenta que facilitaron una mayor difusión del conocimiento. Además de la publicación de la Gramática castellana de Antonio de Nebrija y del descubrimiento de América, ambos hechos ocurridos en 1492, en el siglo XV europeo destacan grandes humanistas como los pintores italianos Leonardo da Vinci y Sandro Botticelli, o el poeta francés François Villon.
Para la historia, el XV es el último siglo de la Edad Media y un tiempo de transición al Renacimiento: Pre-Renacimiento.
Contenido
La sociedad
La sociedad del siglo XV es conflictiva. En Castilla, la alta nobleza tiene una posición hegemónica; en cambio, los campesinos vivían en condiciones cada vez más lamentables, lo que provocó un estallido de revueltas antiseñoriales.
Las relaciones entre los miembros de las tres comunidades étnico-religiosas (cristianos, judíos y musulmanes) se deterioran progresivamente. Hasta ese momento, habían convivido en un entorno de tolerancia mutua.
La crisis política
En Castilla, se vive en una anarquía con los reinados de Juan II y de Enrique IV, que son objeto de visibilidad para los cronistas e historiadores.
A finales del siglo XV, los Reyes Católicos concentran todo el poder en sus manos e instauran la monarquía autoritaria, unificando todos los reinos peninsulares, excepto Portugal, y culminando el proceso llamado Reconquista, con la conquista del último reino musulmán, la taifa nazarí de Granada.
La cultura
Fue de gran importancia el re-descubrimiento de la antigüedad clásica a través de los humanistas italianos.
Las cortes literarias de Juan II, Alfonso V y los Reyes Católicos se convirtieron en centros de difusión humanística.
La mentalidad
Las manifestaciones literarias se intensifican en el siglo XV.
El hombre vuelve a tener fe en sí mismo y es consciente de su propia individualidad (homomensura o antropocentrismo, optimismo).
El pueblo es movido por un espíritu materialista, pero su sentido vitalista no se consolida hasta el siglo siguiente, el XVI, con el Renacimiento.
En la Baja Edad Media (siglos XIV y XV), todavía nos encontramos un mundo lleno de contrastes, como retrata magníficamente una obra maestra de esta época, La Celestina.
Géneros literarios
En este periodo de transición entre la Edad Media y el Renacimiento, se mantuvieron en muchos aspectos literarios, aunque también hubo pequeños cambios.
En primer lugar, desaparecerán los cantares de gesta, al igual que los poemas del mester de clerecía. Por contra, surgirá el Romancero viejo. Además, resurgirá el género épico, enriquecido con nuevos temas.
Dejando aparte al teatro, la literatura del siglo XV podría dividirse en dos apartados: por un lado, la prosa y, por otro, la poesía.
La poesía
La poesía podía dividirse en otras dos ramas: en primer lugar, la poesía popular y/o tradicional; y en segundo lugar, la poesía culta.
- La poesía popular:
Se caracteriza por reflejar el habla coloquial y familiar y por servirse de recursos propios de la literatura de transmisión oral. Se subdividía en dos grupos: la poesía popular lírica y la poesía popular narrativa.
- En la poesía popular de carácter lírico, destacan los villancicos, es decir, los cantos tradicionales donde se expresan los sentimientos del pueblo.
- En la poesía popular de carácter narrativo, destaca el Romancero viejo, constituido por un conjunto de romances anónimos anteriores al siglo XV. Los romances son un tipo de poemas narrativos y tradicionales destinados al canto. Se caracterizan por su concentración expresiva y su dramatismo.
- La poesía culta:
Se distingue por emplear una lengua latinizante (muchas palabras proviene del latín), tanto en la prosa como en el verso, y por ser obras de autoría reconocida, individuales y no colectivas o tradicionales. Esta admiración por el latín provoca la inclusión de numerosos cultismos en los poemas de los creadores. Las composiciones de los autores se recogen en los famosos Cancioneros, que son colecciones de distintos creadores del siglo XV. Los Cancioneros conciben el amor como un juego cortesano y literario. El poeta adopta el papel de servidor de su dama.
Además de la poesía cancioneril, existe también un poesía alegórica, caracterizada por ser altamente elaborada, ya que aborda temas filosóficos, como la fama, la fortuna o la muerte.
La prosa
En la prosa, por otro lado, se destacan las novelas de ficción, tanto románticas como de caballerías, como las obras didácticas y las históricas.
El teatro
El teatro también reaparecerá, vinculado a los lugares en los que se desarrollan las diversiones populares o las celebraciones religiosas (como el Corpus o la Navidad).
