La poesía dieciochesca en España

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Los géneros poéticos en la España del siglo XVIII

  • Autor: Noa Sánchez Blanque. 1º Bachillerato C. Curso 2020-2021.
  • Fecha: Marzo de 2021.
  • Fuentes consultadas:
      - Alonso, Santos y otros: Lengua castellana y literatura.
        1º Bachillerato. Barcelona, Casals, 2016, tema 14,
        "Neoclasicismo y Prerromanticismo", pp. 306-329.

El ambiente general del siglo no favorece que se haga un poesía emotiva y original. La tendencia a la didáctica y a la repetición de modelos determinaron unas formas sin fuerza expresiva. Como veremos a continuación, predominarán en el siglo XVIII los géneros poéticos con mensaje pedagógico o de contenido mitológico. Entre los géneros poéticos de moda en el Neoclasicismo destacan los siguientes:

  • La anacreóntica, composición lírica en verso de arte menor que canta a los placeres de la vida, el vino y el amor. El subgénero se intercomunica con temas como el bucolismo, el simposio (o banquete) y el amor, que se localizan en otros tipos de poesía.
  • Los idilios, de carácter pastoril, un tipo de poesía que describe la vida en el campo de forma idealizada, incluyendo descripciones de la belleza natural y de las tareas agrícolas, alabanzas a la vida sin complicaciones ni estrés en contraste con lo que ocurre en la gran ciudad, etc. Puede contener también escenas de amor que se benefician del entorno sensual del campo.
  • La sátira, género cuya finalidad es ridiculizar a una persona o burlarse de determinadas situaciones. La sátira se encuentra fuertemente impregnada de ironía, que en ella es militante, o de sarcasmo; además, la parodia, la burla, la exageración, las comparaciones, las yuxtaposiciones, la analogía y las dobleces son recursos usados de manera frecuente en este tipo de poesía.
  • La epístola, un texto cuya función principal es la comunicación entre el remitente o emisor (el escritor que la redacta y envía) y el destinatario o receptor. El género epistolar suele implicar un registro culto y un contexto literaturizado (presupone personas cultivadas que aprecian la lectura y la escritura).
  • La oda, canto en verso caracterizado por un tono elevado, por abordar temáticas elevadas (religiosa, heroica, amorosa o filosófica) y por contener alguna reflexión poética. Su extensión es variable, así como su métrica y su estructura. Ha sufrido muchas modificaciones a lo largo de los siglos.
  • La fábula, creación literaria generalmente breve, escrita tanto en prosa como en verso y protagonizada por animales u objetos animados que están personificados. Siempre contiene una moraleja o enseñanza moral.

Juan Meléndez Valdés (1754-1811)

Juan Meléndez Valdés

Escritor y magistrado, estudió derecho en la Universidad de Salamanca, en la que ejerció como catedrático de humanidades desde 1781. Desempeñó diversos cargos públicos: alcalde del crimen en Zaragoza (1789), oidor en Valladolid (1791) y fiscal en Madrid (1797).

Las obras de su segunda etapa poética se caracterizan por su contenido filosófico y su sentimentalidad prerromántica; con posterioridad, su obra se orientó hacia el compromiso político y social (“A Llaguno”, 1794; “Sobre el fanatismo”, 1795). Es también autor de una célebre “Defensa de la lengua castellana” (1811).

Como poeta, Meléndez Valdés alcanzó pronto el refrendo público. Por aquellos años, la Real Academia Española de la Lengua organizaba unos concursos de poesía y elocuencia para promover los nuevos temas literarios y el estilo neoclásico entre los escritores noveles. En 1780, con el tópico de la alabanza de la vida rural (el horaciano carpe diem), obtuvo el premio con "Batilo", égloga que se editaría ese mismo año en Madrid.

En 1783, escribió Las enamoradas anacreónticas y Los besos de amor.

En 1784, participó en los premios de la ciudad de Madrid a la mejor composición dramática, obteniendo uno de ellos con su obra Las bodas de Camacho el rico. Para entonces, era ya un poeta maduro y conocido en los ambientes intelectuales de su época.

El famoso impresor Joaquín Ibarra publicó, en 1785, el primer volumen de sus poemas con gran éxito, realizándose diversas ediciones.

Meléndez Valdés fue el poeta más importante del siglo XVIII, su poesía anacreóntica y bucólica, emparentada con el Rococó, convivió con su producción de poesía civil y filosófico-moral (característica del Neoclasicismo) y con su poesía humanitaria (propia del Prerromanticismo). La visión de la naturaleza en sus composiciones fue evolucionando, desde una contemplación puramente descriptiva hasta la interpretación melancólica y sentimental presente en las Elegías morales, que anticipan el enfoque romántico.

Otros poetas del Neoclasicismo español

En la primera mitad del siglo XVIII, la poesía sigue siendo aún de estilo posbarroco. Destacan autores como Álvarez de Toledo, Torres de Villarroel o Gerardo Lobo, que continúan haciendo poesía al modo en que se hacía en el siglo anterior.

En la segunda mitad del siglo, se impone la nueva poesía neoclásica, cuyos principios normativos y estéticos estaban inspirados en la Poética, del aragonés Ignacio de Luzán, el más famoso preceptista de su tiempo. Entre los poetas neoclásicos más destacados de España encontramos a:

José Cadalso (1741-1782)

El coronel Cadalso

Nació en 1741, en Cádiz, de familia noble, pero de pocos recursos. Huérfano de madre a los tres años, no conoció a su padre hasta que tenía nueve. Se educó con los jesuitas en Cádiz y París. De 1758 a 1760, estudió en el Real Seminario de Nobles, en Madrid. En su juventud, viajó mucho y su variada cultura fue adquirida en el estudio y los viajes.

En 1762, se alistó como "voluntario con caballo y armas propias" en el Regimiento de Caballería Borbón y ascendió a capitán en 1764.

En 1768, Cadalso salió exiliado de Madrid durante seis meses como presunto autor del Calendario manual, sátira de la sociedad madrileña en la que se reconocieron retratadas varias damas de la alta sociedad.

En 1776, sucedió el Motín de Esquilache y Cadalso salvó la vida al conde de O'Reilly. A causa de este acto, fue nombrado Caballero de la Orden Militar de Santiago.

En 1777, ascendió a comandante de escuadrón.

Entre 1779 y 1781, participó en el asedio a Gibraltar.

Ascendió a coronel en 1782, poco antes de morir, y el 26 de febrero de ese año, sufrió un accidente militar en el sitio de Gibraltar que le produjo la muerte.

Como representante de la Ilustración, mostró preocupación por los problemas de su patria. En sus obras, critica a la sociedad a fin de mejorarla. En sus escritos, mantiene una doble actitud de fe en los avances de su época y de pesimismo ante la realidad que analiza.

Cadalso publicó sus poemas en un volumen titulado Ocios de mi juventud, aunque es más conocido como prosista que como poeta, sobre todo por su novela epistolar Cartas marruecas, inspiradas en las Lettres persannes, de Montesquieu.

Gaspar Melchor de Jovellanos (1744-1811)

Nació en Gijón, el 5 de enero de 1744. Político y escritor español, hijo de una familia de la pequeña nobleza. Estudió en Oviedo, Ávila y Alcalá, en cuyo colegio de San Ildefonso se doctoró en cánones a los veintiún años.

Tras finalizar sus estudios, ingresó en la Administración y, en 1767, fue trasladado a Sevilla para desempeñar el cargo de alcalde del crimen.

Ya en fecha muy temprana, empezó a compatibilizar sus tareas laborales con su afición por el estudio y la escritura, influido siempre por las corrientes ilustradas.

En 1787, presentó el drama El delincuente honrado, escrito en 1773.

Por las mismas fechas, se aproximó a la poesía con las epístolas “Jovino a sus amigos de Salamanca”, de tono moralizante y neoclásico, y “A sus amigos de Sevilla”, de contenido sentimental.

Hasta mayo de 1802, residió en la cartuja de Valldemosa, en la cual escribió Memoria sobre educación pública, obra en la que defendía la necesidad de establecer la enseñanza del catalán en Mallorca, al tiempo que proponía la creación de un centro educativo en la isla. Posteriormente, fue confinado en el castillo de Bellver, en Mallorca, en donde aprovechó para redactar varias obras, entre ellas: Memoria histórica sobre el castillo de Bellver, publicada póstumamente, y Tratado teórico práctico de la enseñanza.

Fue liberado tras el motín de Aranjuez, en marzo de 1808, tres años antes de su muerte.

Jovellanos ha pasado a la historia de la literatura como un gran intelectual y polígrafo que cultivó todos los géneros: la prosa erudita (ensayo), el teatro y la poesía.

Nicolás Fernández de Moratín (1737-1780)

Nicolás Fernández de Moratín

Escritor español, nacido en Madrid, el 20 de julio de 1737, y fallecido en la misma ciudad, el 11 de mayo de 1780.

Su obra literaria participa de las dos grandes corrientes artísticas que atraviesan el siglo XVIII:

  • la tradicional, que intenta mantener vivos los gustos del pasado reciente; y
  • la neoclásica, de inspiración francesa, que rechaza los excesos del Barroco y busca nuevos modelos en el arte y la literatura de la Grecia y la Roma antiguas.

Fue un hombre culto con aficiones populares como el teatro, la caza y los toros. Siempre supo compaginar sus ocupaciones serias (por ejemplo, su trabajo como catedrático de literatura en el prestigioso Colegio Imperial de Madrid) con otras aficiones más frívolas, a las que dio dignidad al ocuparse de ellas en su obra literaria.

Nicolás Fernández de Moratín es recordado por su poesía y, en menor medida, por su teatro. También escribió obras sobre asuntos diversos, como Carta histórica sobre la fiesta de los toros (1777), con la que mostró las contradicciones propias de su generación, al tiempo ilustrada y tradicionalista.

La poesía de Moratín senior (así llamado para distinguirlo del otro Moratín, Leandro) incluye poemas de inspiración barroca y composiciones al modo neoclásico.

Félix María de Samaniego (1745-1801)

Escritor ilustrado, fue músico, ensayista y dramaturgo. Sus estudios en Francia dieron consistencia al humanista, formación que completó con la lectura constante de autores hispanos y extranjeros. Gran parte de su obra está ligada a la Real Sociedad Bascongada de Amigos del País, así como al innovador Real Seminario Patriótico de Vergara, del que fue director.

Como poeta, fue autor de fábulas y de un manual educativo, obras que se convirtieron en excelente vehículo para la transmisión de su ideario reformista de la sociedad, la política, la moral y la literatura de su tiempo. También escribió cuentos picantes en verso, expresión del espíritu sensualista que también cabía en la mentalidad ilustrada.

Su obra más relevante son sus Fábulas morales (1781), escritas con el fin de instruir a sus alumnos, colección de 137 apólogos tomados de Esopo, Fedro, La Fontaine y John Gay. Las fábulas más conocidas son: “La paloma”, “Congreso de ratones”, “La cigarra y la hormiga”, “El perro y el cocodrilo” y “La zorra y las uvas”.

Tomás de Iriarte (1750-1791)

Tomás de Iriarte

Escritor español. Junto con Félix María de Samaniego, uno de los fabulistas más importantes del siglo XVIII.

Sobrino del académico Juan de Iriarte, a los trece años se trasladó a Madrid para vivir con su tío, lo que le permitió adquirir una sólida educación. Sucedió a su pariente como traductor de la Secretaría de Estado y ocupó el cargo de archivero del Consejo de Guerra. Su figura destacó en los ambientes literarios. Frecuentó la tertulia de la Fonda de San Sebastián, donde trabó amistad con Cadalso y Nicolás Fernández de Moratín. Agudo crítico y gran polemista, mantuvo disputas con Ramón de la Cruz, Juan Pablo Forner y Samaniego.

Su mayor popularidad se debió a las Fábulas literarias (1782), publicadas un año más tarde que las de Samaniego, donde reunió una serie de poemas satírico-moralizantes que encierran una burla feroz de sus coetáneos. El autor aplicó a estos apólogos los preceptos clasicistas, se hizo eco de las ideas estéticas de su tiempo y se sometió a las reglas de universalidad, unidad formal y didactismo.

A pesar de que sus versos son de mayor variedad métrica que los de Samaniego, sencillos y claros, sus rimas resultan un tanto forzadas y nunca alcanzan la vivacidad de las de su rival. No obstante, su gran acierto consistió en trasladar al género fabulístico las normas de la preceptiva, como puede apreciarse en piezas como "El burro flautista", "La mona", "Los dos conejos" o "El caballo y la ardilla".

Bibliografía, webgrafía

  • Alonso, Santos y otros: Lengua castellana y literatura. 1º Bachillerato. Barcelona, Casals, 2016, tema 14 "Neoclasicismo y Prerromanticismo", pp. 306-329.

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Edición, revisión, corrección

  • Primera redacción (enero de 2021): Noa Sánchez Blanque, 1º Bachillerato C. Curso 2020-2021.
  • Revisiones, correcciones: Letraherido.