''Los santos inocentes'' (1981): Texto 1 y pregunta anexa (Los personajes)

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   "…y la Régula, ae, estará sucia, y el Azarías, alcánzame a la Niña Chica, y, ante su insistencia, la Régula se incorporó
y regresó con la Charito cuyo cuerpo no abultaba lo que una liebre y cuyas piernecitas se doblaban como las de una muñeca de
trapo, como si estuvieran deshuesadas, pero el Azarías la tomó con dedos trémulos, la acomodó en el regazo, sujetó
delicadamente su cabecita desarticulada contra su brazo fornido, bajo el sobaco, y comenzó a rascarle suavemente en el
entrecejo mientras musitaba, milana bonita, milana bonita…"

Pregunta - Identifique los personajes que aparecen en el siguiente pasaje. A continuación, desarrolle el epígrafe «La caracterización de los personajes en Los santos inocentes»

NOTA 1: Esta pregunta también puede formularse así: Señale qué relación familiar existe entre los tres personajes que aparecen en el siguiente pasaje.
A continuación, ponga en relación dichos personajes con el epígrafe «La caracterización de los personajes en Los santos inocentes» (Sigue el fragmento)
NOTA 2: Responderemos aquí solo a la primera cuestión, la de identificar los personajes que aparecen en el pasaje. Para la otra pregunta, referida al epígrafe
"Caracterización de los personajes", puede verse la pregunta de esta Wikimpace La caracterización de los personajes en Los santos inocentes.

Criterios específicos de corrección

El alumno deberá reconocer el pasaje como situado en el medio de la novela y deberá comentar los personajes que aparecen en él: la Régula, con su interjección característica, "ae"; Azarías, con su obsesiva reiteración: "milana bonita"; y la Niña Chica o Charito, caracterizada como una deficiente mental de dependencia absoluta, todo ello ubicado en ese ambiente de suciedad y pobreza extrema, de degradación y animalización característicos de Los santos inocentes.

En cuanto a los personajes, el alumno deberá comentar cómo se organizan en la novela los principales, divididos sobre todos entre opresores y oprimidos y entre protagonistas y secundarios. En todo caso, deberá hablar de los personajes que son evocados en el fragmento, ya citados antes, y también de Paco el Bajo, el señorito Iván, don Pedro el Périto, Purita, el Quirce, Nieves, Rogelio, la marquesa, la señorita Miriam, el obispo, los ministros del Régimen, el médico..., citando tan solo a los menos relevantes y comentando más por extenso las características de los más relevantes.

Contextualización del fragmento seleccionado

En este pasaje -que se ubica en la parte central de la novela, cuando vamos conociendo a Paco el Bajo y su familia, verdaderos protagnistas de la historia-, se cita a algunos de los personajes más importantes de la novela de Delibes, verdaderos "santos inocentes", víctimas de la opresión social: Azarías y su milana, Régula y la Niña Chica, de la que se dice que Charito es su nombre. Cada personaje aparece caracterizado por algún rasgo personal:

  • Régula, por su interjección característica, "ae", propia del registro vulgar, como persona iletrada que es, privada del derecho a la educación por una injusta situación social.
  • Azarías, por su fortaleza ("su brazo fornido"), su inocencia y bondad ("dedos trémulos", "sujetó delicadamente su cabecita", "comenzó a rascarle suavemente") y su frase obsesiva: "milana bonita, milana bonita". La milana es para él mucho más que una mascota: es la representación de la propia naturaleza, del respeto debido a las leyes naturales. Azarías identifica con la milana a la Niña Chica, mostrándole así su cariño y también su necesidad de dar y recibir afecto, algo a lo que no está acostumbrado, ya que en el mundo "normal" no ha recibido más que insultos y desprecios. De alguna manera, ambos "inocentes" están animalizados: Azarías, porque acaricia a la Niña como si de una mascota se tratara y ella precisamente por esa condición más animal que humana.
  • La Niña Chica, por su silencio (su única voz en el relato es el grito descorazonador que, de vez en cuando, deja oír). Además, es el personaje más animalizado en su descripción de toda la novela: "no abultaba más que una liebre", sus "piernecitas" se curvan "como las de una muñeca de trapo, como si estuvieran deshuesadas" y el Azarías la trata igual que a su milana. Podríamos decir que es incluso más víctima que Azarías, ya que él aún conserva algunos rasgos de humanidad, pero ellas... Azarías es un marginado, pero aún puede valerse algo por sí mismo (más o menos), disfrutar de la naturaleza y de su amor por los animales. Pero Charito es la víctima total, no queda en ella nada de la condición humana. Su dependencia es absoluta, no posee el don de la palabra y vive en la más absoluta indefensión. En la adaptación cinematográfica de Los santos inocentes, dirigida por Mario Camus, el director nos informa, en el transcurso del largometraje, de que la Niña Chica ha muerto, reforzando así, aún más, su condición de sacrificada, de oprimida por la injusticia social: es una persona a la que se ha robado su condición de tal y ni siquiera logra sobrevivir muchos años, está condenada a la muerte prematura. Téngase en cuenta, sin embargo, que este detalle de moribundia de la Niña aparece en la adaptación cinematográfica, pero no en la novela original.

Yendo al terreno lingüístico, llama la atención cómo Delibes mezcla en el pasaje -y en toda la novela- las voces del narrador y de los personajes, cómo todo queda subsumido en un único discurso narrativo donde oímos las voces de unos y otros sin que quede a veces claro quién es el que habla, eliminando los signos de puntuación que normalmente sirven de referencia para marcar los cambios de interlocutor: la raya, los guiones, las comillas, los puntos y aparte..., y utilizando variedad de registros (culto el del narrador, vulgar el de los personajes) en sucesión ininterrumpida. Ello tiene que ver, naturalmente, con la moda experimentalista que se cruzó por la narrativa española de posguerra a partir de los años sesenta y que, como se comprueba en este fragmento, afectó a nuestro escritor.

Por ejemplo, cuando se dice que Azarías empezó a "rascarle suavemente su cabecita" a la Niña Chica, no sabemos si esa calificación diminutiva, afectiva, "cabecita", corresponde a la opinión del narrador o a la del personaje. Azarías la llama "milana", luego es discutible que sea capaz de esa muestra cariñosa que supone la palabra en diminutivo. Pero el narrador nos la acaba de describir animalizadamente, hablando de sus piernecitas "deshuesadas" y de su tamaño "como una liebre"; por tanto, no es lógico que, a continuación, se deje llevar por la ternura descriptiva. ¿A quién es atribuible, pues, ese rasgo afectivo que supone el diminutivo "cabecita"? La mezcla de voces narrativas, la polifonía novelesca es evidente.

Bibliografía y webgrafía

Trabajos de los alumnos

Edición, revisión, corrección

  • Primera redacción (marzo 2018): Letraherido. Segunda redacción (marzo 2020): Raúl Torrent.
  • Revisiones, correcciones: Letraherido.